Que suerte has tenido!! Cuantas veces podemos escuchar esta frase, en la que achacan o achacamos nuestros éxitos o logros a la suerte, a la fortuna, o a las conjunciones astrales! Yo no creo en la suerte, al igual que no creo que las circunstancias cambien así como así por un golpe de magia.
Ya he hablado muchas veces de la responsabilidad, de hacernos cargo de nuestra propia vida y circunstancias, sólo de esta manera podremos ser libres. Libres de un destino autoimpuesto por nosotros mismos, por nuestras propias creencias limitantes y sesgos cognitivos. Y es que, las circunstancias no cambian, cambiamos nosotros.
Cambiamos la forma de mirar la realidad y por ende, cambiamos nuestras emociones, nuestros actos y los resultados de dichos actos. Sea por lo que sea, porque ya estamos cansados de ir en modo victimitis por la vida, porque tenemos un chute de motivación y adrenalina que nos empuja a ir más allá, por el apoyo de una persona que nos ayuda a impulsarnos o, simplemente, porque hemos encontrado nuestro para qué. Sea como sea, hemos cambiado, en ese momento puntual que nos ha cambiado la vida, ya sea mucho o poco, ya sea a largo o corto plazo, pero has sido tú y solo tú quien lo ha hecho posible.
Ahora que estás levantado y sabes que no es cosa de suerte, sabes que ahora tienes la responsabilidad de seguir en pie, dejar a un lado la suerte, el destino y mirar más allá. Has cambiado tú, has cambiando tus circunstancias, has cambiado tus resultados, HAS CAMBIADO TU VIDA.
Y es que las casualidades no existen, todo pasa por alguna razón, con un PORQUE, ahora bien, es nuestra responsabilidad que suceda con un PARA QUÉ. Haz tuya tu vida y los hechos que ocurren en ella, porque todo cambia cuando tienes presente que tienes un final, que un día morirás. Hoy puede ser el último día de tu vida, aprovéchalo como si fuera el último y mira a mañana como si fueras a vivir siempre.
A ti, mi amiga, que me has inspirado para escribir estas pocas palabras, como un fénix resurgirás, no por alguien, ni por ninguna circunstancia externa, sólo por ti, por tus ganas, tu energía y tu fuerza para luchar y salir adelante, sólo tú tienes el poder para cambiar tu vida. Y recuerda,
