La importancia de la respiración se manifiesta en todas nuestras funciones vitales. Durante la respiración habitual que realizamos utilizamos solo un tercio de nuestros pulmones, lo que significa que no le estamos dando posibilidad al cuerpo de estar todo lo sano y alerta que podría ser.
En los momentos de tranquilidad, el cerebro del ser humano consume el 60 por ciento del oxígeno que entra a su cuerpo, mientras que en los estados de tensión puede llegar a consumir hasta 95 por ciento. Lo que sucede es que mientras la mayoría del oxígeno se utiliza en los procesos del pensamiento, que se encuentra funcionando en toda su capacidad, el resto del cuerpo se mantiene con nivel mínimo. Las células no encuentran el oxígeno necesario para liberar las toxinas acumuladas, por lo que estas comienzan a circular libremente por nuestro organismo. Dicha sangre con mayor concentración de dióxido de carbono afecta su funcionamiento y vienen luego el malestar, la dolencia y la enfermedad.
Domina la respiración
El dominio de la respiración permite manejar nuestras tensiones, temores y preocupaciones, aumentar nuestras aptitudes y poderes perceptivos, desarrollar la memoria y la concentración y sintonizar con el ritmo del universo.
Los yoguis desarrollaron el arte de respirar más completo y perfecto que se conoce. De todas maneras, nosotros podemos aprender técnicas de respiración apropiada,
Para que se produzca el proceso de purificación de oxígeno, la respiración debe ser completa, consciente y rítmica. Como ejercicio diario a aplicar, es recomendable detenernos varias veces al día para asegurarnos de que estamos haciendo inhalaciones y exhalaciones profundas y regulares, conscientes del movimiento de aires que entra y sale de nuestros pulmones. Por lo tanto, ser un observador de nuestra respiración. “Nos tomamos unos segundo al terminar una actividad, y antes de iniciar otra para observar la respiración y ser consciente de ella, ya que nos trae al aquí y ahora. Inhalo y observo como el aire entra por las fosas nasales, se llena de aire los pulmones y exhalo, percibo como cambia la temperatura del aire al soltar el aire por las fosas nasales y como se desinflan los pulmones”.
La respiración siempre debe empezar llenando los pulmones desde su parte baja, que es la más ancha de estos órganos, para ir desplazando el aire hasta las zonas más elevadas de los pulmones. Si se respira solamente con el pecho, se descuida la parte baja, dejando faltos de oxigeno fresco a la mayoría de los tejidos pulmonares.
La respiración completa
Para realizar la respiración completa buscar un lugar en donde este solo, acostarse totalmente relajado y con los ojos cerrados vaya inhalando y llenando primero la parte inferior de los pulmones y luego la media y por último la superior. Cuando se exhala, primero se expulsa el aire de la parte superior, luego de la central y por fin de la parte inferior. Esta manera de respirar permite que los pulmones se vacíen por completo, eliminando el aire de las partes inferiores que tiende a depositarse allí, saturado de productos de desechos. Este ejercicio, de inhalar y exhalar, se ejecuta de manera continua, suave e ininterrumpida.
Aspectos importantes de la respiración
-La respiración debe ser consciente, darme cuenta que respiro y que gracias a ella estoy vivo.
-La respiración tiene que ser rítmica, ya que mantener el ritmo al respirar es fundamental para mantener la salud de todo el organismo, en especial del corazón. Además la respiración rítmica calma la mente: se puede coordinar el ritmo respiratorio con los latidos del corazón. Al respirar de este modo, el ritmo penetra todas las células del cuerpo, creando un sistema de equilibrio y armonía general. El ritmo es la clave de la salud. La inhalación correcta tiene importancia para el corazón, y la exhalación es más importante para el cerebro, ya que estimula el funcionamiento de las células nerviosas cerebrales.
-La respiración debe ser completa, llenando la parte baja, media y alta de los pulmones.
-La respiración favorece la relajación, ya que es el elemento clave para lograr la distensión de todo el organismo.
-La respiración puede ser utilizada para restablecer el equilibrio general a nuestro cuerpo. A través de un manejo consciente de ella se puede alterar la situación mental, física, espiritual y emocional que se está viviendo.
Prana y Pranayama
Prana es la energía vital, la fuerza cósmica que está presente en todo lo que vive: lo tienen el aire, el agua, la comida y la naturaleza.
Todos incorporamos el Prana en nuestro cuerpo, aunque no todo el mundo lo hace con la misma fuerza. Todo depende de lo que cada uno lleva adentro.
La circulación del Prana se puede desarrollar a través de los ejercicios de respiración y puede manejarse a voluntad con la mente. El yoga enseña a respirar bien, o sea utilizando toda la capacidad pulmonar y no dejar nuestro cerebro desprovisto de Prana vital.
Pranayama es la regulación del aliento o el control del Prana, energía vital que se encuentra en todo el ser. El Pranayama es el control del movimiento de los pulmones u órganos respiratorios para dominar el Prana que vibra dentro de ellos. Esto se logra mediante la concientización de la inhalación y la exhalación.
La respiración yóguica se realiza en tres etapas: inspiración, retención, exhalación.
“El valor del yoga no se explica, debe ser experimentado” B.K.S. Iyengar